La Cubierta para tortas



Hola a todos!!!
Me contenta muchísimo poder estar en contacto con todos los seguidores de la repostería a través de este blog, y haber recibido tantos comentarios positivos en la primera entrega fue muy emocionante, además me motiva a seguir brindándoles más de mis trabajos.
Esta semana, como les había comentado, el blog está dedicado a las cubierta para tortas.
No hay manera de decorar una torta que quede más bella que usando una cubierta.  Es algo trabajoso, porque hay que amasar y amasar muchísimo, pero hay que reconocer que bien vale la pena el esfuerzo, y si no, pongan a los esposos y novios a que las ayuden, porque definitivamente nos llevan ventaja en cuanto a la fuerza que se necesita para amasar.

Aunque actualmente podemos comprar las cubiertas ya hechas en las tiendas de repostería, considero que es importante saber hacerla, por si acaso tenemos que prepararla de emergencia.
Existen muchos tipos de cubiertas, las que le dicen laminadas, gamuzadas, etc. Desde hace ya muchos años yo me casé con una receta fantástica, que es la Cubierta Roy.  En mis inicios la preparaba un poco diferente, incluso llegué a experimentar un poco mezclándola con la cubierta marshmellow, pero nunca me convenció totalmente el resultado, además que era ¡el doble del trabajo!

En resumidas cuentas, esta es la receta de la Cubierta Roy que yo realizo, y cómo siempre les digo a mis alumnas: yo sólo hago esta cubierta porque me funciona para cubrir tortas, hacer modelados, esculturas, tortas infantiles, de bodas, etc. y no la cambio por ninguna otra.


Por supuesto, depende de cada quien si les gusta o prefieren utilizar alguna otra para otro tipo de trabajo, mi consejo es que traten de hacer una sola receta muchas veces hasta que la conozcan muy bien y la hagan a la perfección.
Esta receta que les coloco abajo alcanza para una torta de medio kilo, que es la torta de 6 huevos, etc., es decir para 20 personas.  Si necesitamos hacer una torta para el doble de personas, simplemente multiplicamos todos los ingredientes por 2 y listo.  También hay que sacar la cuenta si tenemos que realizar algún modelado o detalle adicional.

Esta cubierta dura hasta 3 semanas a temperatura ambiente (ojo, no debajo del sol de río chico) y unos 3 meses en la nevera (no congelador), así que la podemos preparar con bastante anticipación para siempre estar preparados.
Después de preparar la cubierta podemos utilizarla al momento (lo que no es tan recomdable) o por lo menos refrigerarla media hora para que esté más consistente para amasarla.

Otra recomendación es agregarle esencias que sean transparentes y que se adapten a todos los gustos. En mi caso, no me gusta la esencia de almendra y me encanta la de nata, vainilla o leche condensada, porque son suaves y combinan con tortas para cualquier ocasión.
Aunque esta sea mi favorita, más adelante compartiré con ustedes algunas variaciones de esta receta y otras cubiertas más para las tortas.

Me despido de ustedes hasta la semana próxima, en la cual les escribiré acerca de los diferentes rellenos para las tortas decoradas.
Mil gracias de nuevo por sus comentarios, todos han sido muy nutritivos, divertidos y super interesantes.

Besitos,


Arianí Medina


CUBIERTA  ROY

1/4 taza de agua
2 cucharadas de gelatina sin sabor
1/4 taza de glicerina
1/2 taza de glucosa
esencia al gusto
3 tazas de azúcar pulverizada

Hidratar la gelatina en el agua y dejar reposar por unos minutos. Colocar la gelatina en baño de maría y revolver hasta que esté muy bien disuelta. Agregar la glicerina, glucosa y la esencia mientras se mueve con una cucharilla. Una vez que la mezcla esté homogénea retirar del baño de maría, agregar el azúcar pulverizada cerniendo ésta directamente sobre la preparación.  Revolver enérgicamente, guardar en un envase engrasado y tapar.
Para usar la masa, amasarla con dos a tres tazas más de azúcar pulverizada o hasta que ésta adquiera la consistencia deseada.